Un día sofocante y caluroso puede hacer que anheles un helado o una bebida fría, pero estamos aquí para decirte que hay una forma más efectiva y saludable de combatir el calor del verano de adentro hacia afuera: hierbas refrescantes. Muchas hierbas medicinales son conocidas por sus propiedades.
Según el herbolario Benjamin Zappin, las hierbas refrescantes pueden caer en una o ambas de las siguientes categorías: refrigerantes y diaforéticas. Las refrigerantes funcionan enfriando los tejidos, lo que reduce la temperatura corporal. Las diaforéticas, por otro lado, estimulan la transpiración. Usar una hierba que hace que la sudoración se enfríe puede parecer contradictorio, pero la sudoración es esencialmente la versión corporal del aire acondicionado. Cuando el aire empieza a evaporar el sudor, te enfrías. Además, el efecto de las hierbas diaforéticas es sutil, así que no te preocupes por gotear un poco de sudor después de usarlas.
Las 8 hierbas enumeradas a continuación tienen propiedades refrescantes. Sigue leyendo para descubrir cómo utilizarlos para enfriar tu cuerpo.
La lavanda es un ingrediente de uso común en cosméticos y jabones. Es un refrigerante, lo que significa que ayuda a bajar la temperatura corporal, especialmente en forma de aceite esencial. Puede frotarlo en sus palmas, aplicarlo en sus sienes o mezclarlo con su agua de baño.
Según la investigación, el aceite de lavanda también puede tener propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar en la curación de quemaduras menores y picaduras de insectos. Los estudios en humanos también sugieren que puede ser beneficiosa para tratar la ansiedad, el insomnio y las migrañas.
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La menta es una de las hierbas más fáciles de encontrar fresca. Hay cientos de variedades de menta, pero las mejores para el verano son la menta y la hierbabuena. La menta contiene mentol, un compuesto aromático con sabores dulces y picantes. El mentol activa receptores sensibles al frío en la piel, lo que da como resultado una sensación de frescor. Otra forma en que la menta ejerce su magia refrescante es estimulando las terminaciones nerviosas de la boca responsables de la sensación de temperatura.
La mejor manera de usar menta para refrescarte es agregándola a tu bebida. Puedes beber té de menta o hacer una infusión fría de hojas de menta fresca en un frasco de agua fría.
El cilantro, es una hierba diaforética. Induce la transpiración y reduce la temperatura corporal interna. Al hacerlo, el cilantro ayuda al cuerpo a deshacerse de las toxinas. También es útil para bajar la fiebre. Otros beneficios para la salud de esta hierba incluyen propiedades antioxidantes y anticancerígenas. También se ha demostrado que tiene un efecto positivo sobre el azúcar en sangre en ratas, según un estudio de 2018.
Entonces, ¿cuál es la mejor manera de utilizar el cilantro? Es una excelente adición a sopas, ensaladas y salsas.
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Aunque la rosa técnicamente no es una hierba, esta planta versátil se ha utilizado durante mucho tiempo por sus propiedades medicinales, incluidas sus cualidades refrescantes. Se ha demostrado que el aroma de una rosa reduce el estrés mental, que a menudo puede verse agravado por el calor. Cuando se aplica sobre la piel, la rosa no solo refresca e hidrata, sino que también alivia cualquier hinchazón o enrojecimiento.
La rosa se puede utilizar de muchas formas, desde agua de rosas hasta té de rosas fragante. Para preparar agua de rosas, cocina a fuego lento pétalos de rosas frescas en agua filtrada a fuego medio durante unos 12 minutos y luego cuela los pétalos. Llena la mitad de una botella de spray con la mezcla concentrada y el resto de la botella con agua corriente. Y ahí tienes la solución perfecta para humedecer tu rostro y refrescar tu piel durante todo el día.
El eneldo es típicamente una hierba culinaria que se ha demostrado que tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y anticancerígenas. Como diaforético, el eneldo dilata los vasos sanguíneos y expulsa el calor a través de la piel. En otras palabras, enfría el cuerpo de adentro hacia afuera. Un estudio de 2016 también señaló que el eneldo puede ser útil para aliviar los dolores de estómago y la diabetes.
El eneldo se puede usar para agregar sabor a una variedad de platos: sopas, guisos, salsas, aderezos y salsas. Es una excelente guarnición para las papas, combina bien con el pescado, especialmente el salmón, e incluso puede complementar las tortillas.
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La pamplina tiene muchos usos culinarios y remedios caseros que se remontan a siglos atrás, y la ciencia ha demostrado que algunos de ellos son efectivos. Debido a sus efectos refrescantes, se ha utilizado para tratar erupciones cutáneas, eccemas y psoriasis. Investigaciones recientes confirman que la pamplina tiene propiedades antiinflamatorias cuando se aplica sobre la piel. Además de ser un refrigerante, la pamplina también es rica en fibra y se considera una buena fuente de vitamina C, zinc, calcio y magnesio.
La hierba gallinera se puede aplicar tópicamente, infundir en aceite, hacer tés o comer fresca o cocida. Cuando se seca, la pamplina pierde algo de su potencia y mucho de su sabor, por lo que si la conviertes en un té, se recomienda combinarla con menta.
Probablemente hayas oído hablar de los muchos beneficios del té de manzanilla: facilita la digestión, calma los nervios y estimula el sueño profundo. Bueno, resulta que la manzanilla también se puede usar para enfriar. En parte, esto se debe a sus capacidades antiespasmódicas que ayudan a relajar los músculos. En la incomodidad del calor, tendemos a tensarnos, lo que puede poner tensión en nuestros músculos. Al relajar los músculos, la manzanilla nos ayuda a relajarnos y expulsar el calor reprimido.
La manzanilla es más eficaz como refrescante cuando se aplica tópicamente. Puedes agregar 1-2 gotas de aceite de manzanilla a tu loción corporal o humectante, o mezclarla con el agua de tu baño. Si deseas tomar un relajante baño de manzanilla pero no tienes aceite de manzanilla a mano, unas cuantas bolsitas de té de manzanilla en el agua funcionarán igual de bien.
El hibisco tiene fuertes cualidades refrescantes, lo que lo convierte en un elemento básico para el cuidado de verano. Esta hierba está repleta de antioxidantes que ayudan a combatir los factores estresantes relacionados con los rayos UV. Además de enfriar significativamente el cuerpo, el hibisco también calma la sed cuando se ingiere y hace un gran trabajo para mantenernos hidratados mientras sudamos en el calor del verano. Debido a sus propiedades diuréticas suaves, el hibisco también se usa comúnmente para aliviar la hinchazón.
Los tés de hibisco se pueden encontrar fácilmente en la mayoría de las tiendas naturistas y se pueden disfrutar tanto calientes como fríos. Si bien el té es la forma más popular de tomar hibisco, las flores también se pueden usar en mermeladas o ensaladas.
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