El dolor de espalda repentino puede ser causado por un sin número de cosas, tales como los fuertes entrenamientos físicos, el sobreesfuerzo o cargar bolsas pesadas. Sin embargo, las causas del dolor de espalda crónico pueden ser un poco más complicadas. Vamos a echar un vistazo a aquellas cosas que podrían ser las culpables de tu espalda adolorida. |
1. Estrés |
La angustia mental y emocional puede manifestarse a nivel fisiológico. Si estás bajo temporadas de presión, y te sientes tenso o agotado durante largos periodos de tiempo, tu cuerpo produce una tensión muscular que conduce a dolores y espasmos. El estrés desencadena nuevamente cultivos de dolor en la región del cuello y el hombro, así como en la parte baja de la espalda. Prueba: Las técnicas de relajación como la respiración profunda son ideales para tratar estos casos: Inhala lentamente con una cuenta de cuatro, contén la respiración por otra cuenta de cuatro y exhala hasta la cuenta de cuatro. Además puedes tomar caminatas frecuentes y empezar a considerar la práctica del yoga - ambas son muy útiles. |
2. Tacos Demasiado Altos |
Sabemos que los tacones altos siguen estando a la moda, pero debes saber que ellos pueden ser una de las principales causas de los problemas de espalda. Cuando usas tacones altos te inclinas hacia adelante al caminar, y ejerces una presión extra en tus pies. En consecuencia, esto pone más estrés y tensión en la espalda baja, causándote dolor. Prueba: Hay ocasiones en las que es necesario usar tacones (como en la oficina), por ello es necesario invertir en un buen par de zapatos con el que te sientas cómodo a la hora de caminar. Recuerda cambiarlos por unos bajos al llegar a casa. |
3. No Prestar Atención a lo que Comes |
Según un estudio del Diario de Asia sobre de la espina dorsal publicado en 2014, el 31% de las mujeres y el 25% de los hombres que sufrían de dolores de espalda también tenían problemas gastrointestinales, incluyendo dolor abdominal e intolerancia a ciertos alimentos. Pero ¿cuál es la conexión entre el dolor de espalda y la nutrición? El principal culpable aquí es la inflamación. Los alimentos que son altos en grasa y azúcar causan inflamación en todo el cuerpo, incluyendo en la espalda baja. Prueba: Reduce el consumo de azúcar y cafeína. Come alimentos limpios y enteros en lugar de alimentos procesados, y siempre incluye un alimento rico en proteínas en tus comidas, como la carne o frijoles, además de granos enteros como arroz integral o verduras. |
4. Pantalones Muy Ajustados |
Los trajes que son demasiado apretados pueden constreñir el cuerpo, lo que limita su rango de movimiento, forza a la espalda, el cuello y los hombros. Los jeans ajustados y las faldas lápiz son los peores culpables. Prueba: Cuando compres ropa nueva, asegúrate de que puedes deslizar fácilmente un dedo por debajo de la cintura. |
5. Estar Sentado Todo el Día |
Una de las cosas más perjudiciales para la salud es sentarse todo el día, ya que los músculos se acostumbran a esa posición, haciendo que se tensen. Prueba: Reduce el efecto de la rigidez muscular estirando las pantorrillas y los glúteos cuando te despiertes cada mañana. Realiza también un estiramiento rápido al mediodía y justo antes de acostarte. Y trata de levantarte y caminar alrededor un par de veces durante el día. |
6. Fumar |
Un estudio de la Universidad de Northwestern encontró que los fumadores tienen tres veces más probabilidades que los no fumadores a desarrollar dolor de espalda crónico. Fumar afecta la forma en que el cerebro responde al dolor de espalda, haciendo que las personas que fuman sean menos resistentes a un episodio de dolor. El estudio también encontró que los fumadores que dejaron su hábito de nicotina durante los ensayos experimentaron una disminución en el dolor crónico. Por otra parte, estudios anteriores encontraron que el fumar puede dañar el tejido en la zona baja de la espalda, ya que ralentiza la circulación y reduce el flujo de nutrientes a los músculos traseros. Prueba: Si todavía estás enganchado a los cigarrillos, prueba con estos 8 consejos no convencionales para dejar de fumar. |
7. Deshidratación |
La columna vertebral está compuesta por 33 vértebras. Entre cada disco hay una sustancia gelatinosa compuesta por agua en un 90%. Con el fin de mantener intacta la amortiguación, el cuerpo necesita un flujo constante de fluido. Cuando tu cuerpo está deshidratado, esos discos se vuelven más planos y menos amortiguados, por lo que puede dar lugar al dolor.
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8. Falta de Abdominales |
Si los músculos abdominales son débiles, los músculos de la espalda tienen que trabajar más, lo que puede causar dolor en la espalda baja. Combatir una espalda adolorida con un entrenamiento en los músculos abdominales puede ser una buena alternativa para prevenir o tratar el dolor. También debes prestar atención a cómo te estás sentado o tu posición al estar de pie. Prueba: Si estás listo para el reto, hay una serie de ejercicios abdominales que puedes probar ya sea en Youtube o en un gym con un entrenador personal. |
9. Caderas Desiguales |
Fuente imagen: stockdevil, freedigitalphotos.net Muchas personas no tienen ni idea de que uno de los lados de la pelvis es ligeramente más alto que el otro. Este desequilibrio puede causar un fuerte dolor de espalda en nuestro día a día. Una buena manera de saber si las caderas son desiguales o no es durante una sesión de ejercicios, lo que te permitirá ver cómo tu cuerpo responde a ciertos movimientos. Por ejemplo, si tu cadera izquierda es superior a la derecha cuando se hace una estocada en el lado izquierdo, se puede sentir que los músculos de la cadera tiran con más fuerza. Prueba: Antes de establecer una rutina para curar tu alineación, es vital visitar a tu médico de cabecera con el fin de detectar posibles desequilibrios potenciales. |
10. Infección en el Tracto Urinario |
imagen: stockimages: freedigital.net Una infección urinaria suele ir acompañada de dolor en la espalda inferior y superior, o dolores agudos a lo largo del lado. El dolor de espalda a menudo indica que una infección del tracto urinario se ha extendido a los riñones. Prueba: Los síntomas clásicos de una infección del tracto urinario incluyen también un impulso persistente de orinar o dolor al orinar, así que asegúrate de visitar a tu médico para recibir tratamiento. |